1. Le tienen miedo a sus hijos
"Suelo hacer una prueba por
las mañanas en la que observo cómo un padre da el desayuno a su hijo. Si el
niño dice: '¡Quiero la taza rosa, no la azul!' aunque la madre ya haya echado
la leche en la azul, trato de observar con cuidado la reacción de la
mamá", explica.
"La mayoría de las veces, se
pone pálida y vierte el contenido en la taza que el niño prefiere antes de que
le dé un berrinche", comenta.
Pero para Jenner esto es un
tremendo error. "¿De qué tienes miedo? ¿Quién manda de los dos? Deja que
llore si quiere, y vete de ahí para no escuchar el llanto. Pero, por favor, no
trabajes de más sólo para agradar al niño. Y, lo más importante, piensa en la
lección que le estás enseñando si le das todo lo que quiere sólo por ponerse a
llorar", expresa.
2. Justifican el mal comportamiento
de sus hijos bajo la premisa "así son los niños"
La especialista afirma que muchas
veces ve que cuando los niños se portan mal en público (o incluso en privado),
sus padres los justifican con el clásico "así son los niños".
"Te aseguro que no tiene por qué ser así", manifiesta.
"Los niños son capaces de
mucho más de lo que los padres normalmente esperan de ellos, en cuanto a sus
modales, al respeto por los mayores, las tareas del día a día, la generosidad o
el autocontrol. ¿Crees que un niño no puede quedarse sentado durante la cena en
un restaurante? Nada de eso. ¿Crees que un niño no es capaz de quitar la mesa
sin que se lo pidan? De nuevo, no es así. La única razón por la que no se
portan bien es porque no les has mostrado cómo hacerlo y porque no esperas que
lo hagan. Así de simple. Aumenta la exigencia y tu hijo sabrá cómo comportarse",
asegura.
3. No dejan que otras personas le
llamen la atención a sus hijos
"Antes, los conductores de
autobús, los profesores y otros padres solían tener carta blanca para corregir
a un niño maleducado. Actuaban como ojos y oídos de la madre y el padre si los niños
estaban fuera de su vista, y todo el mundo colaboraba por un interés común:
criar de forma adecuada a niños y niñas", explica.
Jenner dice que en cambio, "en
la actualidad, si a alguien que no es padre del niño en cuestión se le ocurre
regañarlo, a los padres no les hace ninguna gracia. Quieren que su hijo parezca
el niño perfecto, y por eso no aceptan que los profesores u otras personas
digan lo contrario. Se enfurecerán e irán a hablar con el profesor antes que
con su hijo por haberse portado mal en clase. Sienten la necesidad de proyectar
una imagen perfecta al mundo y, por desgracia, su inseguridad se ve reforzada
porque muchos padres se juzgan entre sí".
"Si un niño hace un berrinche,
todas las cabezas se girarán hacia la madre con una mirada reprobadora. En su
lugar, debería ser respaldada, porque hay muchas posibilidades de que el
berrinche haya tenido lugar por no haber cedido ante alguna de las exigencias
de su niño. Más bien, esos observadores deberían decirle: 'Buen trabajo. Sé lo
difícil que resulta poner límites'", añade.
4. Abusan de los "atajos"
Los padres actuales, según Jenner,
recurren a una serie de "atajos" para evitar que sus hijos se aburran
y armen un berrinche.
"Cuando descubres lo bien que
Caillou entretiene al niño en un avión, que no te tiente la idea de ponerle los
dibujos en un restaurante. Los niños también tienen que aprender a ser
pacientes. Tienen que aprender a distraerse ellos solos. Tienen que aprender
que no toda la comida va a estar siempre caliente y lista en menos de tres
minutos y, si es posible, también tienen que aprender a ayudar en la
cocina", argumenta.
Asimismo, ella señala que "los
bebés tienen que aprender a tranquilizarse solos; no hay que sentarlos en una
silla vibradora cada vez que se pongan quisquillosos. Los niños tienen que
aprender a levantarse cuando se caen, en vez de subir los brazos para que mamá
y papá los recojan. Enseña a los niños que los atajos pueden servir de ayuda,
pero que resulta muy satisfactorio hacer las cosas por la vía lenta".
5. Siempre ponen las necesidades de
los hijos por encima de las suyas
"Naturalmente, los padres
tienden a cuidar de sus hijos en primer lugar, y esto es bueno para la
evolución. Yo defiendo la idea de crear un horario que se ajuste a las
necesidades del niño, y que la alimentación y la ropa del niño sean
prioritarias", afirma.
"Sin embargo, los padres de
hoy en día han ido demasiado lejos, sometiendo sus propias necesidades y salud
mental a las de sus hijos. Cada vez con más frecuencia veo a mamás que se
levantan de la cama a cada rato para satisfacer los caprichos del niño. O a
papás que lo dejan todo y se recorren el zoológico de punta a punta y a toda
prisa para comprarle a la niña una bebida porque tiene sed", manifiesta.
"No pasa nada por no
levantarte en mitad de la noche para darle otro vaso de agua a tu hijo. No pasa
nada si el papá dice: 'Claro que vas a beber agua, pero vamos a tener que
esperar hasta llegar a la próxima fuente'. No pasa nada por utilizar la palabra
'no' de vez en cuando, ni hay nada malo en pedirle a tu hijo que se entretenga
solo unos minutos porque mamá quiere usar el baño en privado u hojear una
revista", afirma.
Jenner dice que es mejor corregir
estos errores, ya que por evitar que los niños se sientan incómodos, luego
cuando sea inevitable que sientan alguna molestia, no estarán preparados para
ello.
"Pido por favor a todos los padres y
cuidadores del mundo que exijan más a los niños. Que esperen más de ellos. Que
les hagan partícipes de sus luchas. Que les den menos. Que les pongan retos y
que, juntos, les preparemos para que tengan éxito en el mundo real, y no en el
mundo protegido que hemos creado para ellos", concluye la experta.
Fuente: http://diariocorreo.pe/movil/ultimas/noticias/10388148/estos-son-los-5-errores-mas-graves-que-comet
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por comentar. En breve revisaremos el comentario y lo publicaremos si respeta las normas.